Mamá hoy quiero decirte que te quiero, pero las palabras no me salen. Eres la elegida; de todas las personas que podía haber escogida te elegí a ti y ahora no tengo la manera de decírtelo.
Hay días que vienes tarde de trabajar y lo único que tengo son mis gritos sin sentido y mi nerviosismo como muestra de que necesito y quiero que estés junto a mí.
Sé que la vida que habéis montado vosotros los mayores funciona así. Tenéis que trabajar largas horas a costa de estar con nosotros y yo eso lo respeto. Todo lo mueve el dinero. Pero también tienes que entender que no lo comprenda: ¿cómo podéis crear un mundo en el que os olvidéis de nosotros?
Las excusas ya me las conozco, “es que necesitamos dinero para pagar tu colegio”, “es que quiero tener una vida profesional llena y completa para sentirme bien”… y yo respeto estas y otras muchas “excusas” que validan el que no estés más tiempo a mi lado.
A ti no te echo la culpa, ¡solo faltaba! Pero me pregunto, ¿por qué tienes que trabajar más horas para ganar lo mismo que un hombre? ¿Por qué tienes que demostrar más que un hombre para llegar al mismo sitio que llega él? y así, con estas preguntas, aumenta mi respeto hacia ti, pero aumenta también mi confusión y que no logre entender el mundo que habéis creado.
Otra cosa que llevo muy mal es que vosotros los adultos, de los que tengo que aprender y parecerme a ellos, dicen cosas que luego no cumplen. He oído hablar de conciliar la vida profesional y la personal ¿pero eso no significaría que pudieras estar más tiempo conmigo? y entonces ¿por qué se dice eso si la traducción real es que estás menos conmigo?
¿Por qué decís que hacéis políticas para fomentar la familia y proteger a los niños, y creáis un mundo donde las familias tienen horarios laborales interminables que hacen que, papá y tú, lleguéis a mis abrazos dando bostezos porque ya no podéis más con el día?
De verdad no os entiendo. Yo nunca quise vuestro dinero, ni tener un coche caro, ni tener el último modelo de tablet. NO entiendo de nada de eso. Yo lo único que deseo es estar el mayor número de horas junto a ti y a papá. Y veo que esto no sucede. NO os lo toméis a mal, pero estáis cometiendo algún error.
Luego a veces os oigo hablar en vuestras comidas con amigos sobre que los niños de hoy y los jóvenes han perdido sus valores y no tienen educación. Y yo me pregunto ¿para inculcar estos valores y esta educación no es vital que estéis vosotros los adultos más tiempo con los niños?
Mamá no tomes esto como un reproche hacia ti que no eres más que una pieza del puzzle maldito que hemos creado como sociedad. Nos hemos ocupado más de hacer un móvil táctil que de cómo abrazar a un niño, y dentro de poco tendremos móviles con la última tecnología pero nuestros hijos no estarán ahí para hablar con nosotros.
Por favor, solo quiero estar más tiempo con vosotros. Hacer lo posible para que esto se cumpla. Quiero que las horas que estáis a mi lado estéis descansando y con vuestro tarro de paciencia y de besos lleno para dármelo a mí. Sé que es difícil, pero sé que lo podemos lograr.
Quiero estar con vosotros.
-Reflexiones de una persona con autismo.
Fotografía: David Martín
Comentarios recientes